Curación de Heridas

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¿Te duele tu herida?

El dolor crónico es física y psicológicamente estresante, y su molestia constante te puede provocar irritación, frustración, baja autoestima, depresión e ira, al igual que a tus seres queridos.

¡NO HAY RAZÓN PARA VIVIR CON DOLOR!

te duele tu herida

Acude con el médico especialista en heridas y dile que ¡tienes dolor!
La mayoría de los tratamientos médicos para el dolor no lo eliminan del todo, solo logran disminuir su intensidad y/o frecuencia, por lo que es importante que además de estar bajo tratamiento médico, logres tener actividades que te distraigan y con esto disminuir aún más el dolor.

  • El estrés emocional y físico están estrechamente vinculados, y el dolor persistente puede provocar mayores niveles de estrés. Aprender a vivir con tu estrés de forma saludable te ayuda a enfrentar el dolor crónico con mayor efectividad. Comer bien y dormir bien son formas positivas para controlar el estrés y el dolor.
  • El pensamiento positivo es una herramienta poderosa. El concentrarte en los logros que has podido alcanzar puede marcar una diferencia en la percepción de tu nivel de comodidad.
  • Alejar el dolor de la mente participando en actividades agradables te ayudará a resaltar los aspectos positivos de tu vida. Aislarte de los demás fomenta una actitud negativa, y puede incrementar tu percepción del dolor. Considera la búsqueda de un pasatiempo o afición que te haga sentir bien y te ayude a conectarte con familiares, amigos u otras personas, por ejemplo jugar cartas, domino, clases de tejido o manualidades, boliche, etc.
  • Vivir diariamente con tu dolor puede ser extremadamente difícil, en especial si lo haces sólo. Existen grupos de apoyo para personas con dolor crónico, únete a ellos, son personas que están en tu misma posición y puedan comprenderte y reducir tu carga.
  • Los cambios en el estilo de vida son una parte importante del tratamiento del dolor crónico.
  • Los fumadores tienden a tener más dolor que los no fumadores Dejar de fumar.

Existen varios tipos de terapia que ayudan a aliviar el dolor.

  • La fisioterapia, actividades de estiramiento y fortalecimiento.
  • Ejercicios de bajo impacto, como caminar, nadar o andar en bicicleta, pueden ayudar a reducir el dolor. La terapia ocupacional te enseña cómo tomarte tu tiempo y cómo hacer las tareas ordinarias de forma diferente para no hacerte daño.
  • La terapia conductual puede reducir el dolor con métodos que te ayudan a relajarte, como la meditación y el yoga. También puede ayudar a disminuir el estrés.
    ¡Ánimo! No tienes por que vivir con dolor, acude con el especielista en heridas y ponte a trabajar en tu persona de manera positiva, disfruta tu familia, tus amigos, lo que tienes y reinventate con nuevas actividades que te distraigan del dolor para que así puedas, junto con el tratamiento médico, recobrar el aliento y vivir tu vida de una manera plena.
  • Que tengas una excelente semana!

    Dra. Adriana Lozano Platonoff.

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