Manténgase activo
La actividad física puede ayudar a mantener bajo control la glucosa en la sangre, el peso, la presión arterial y también puede prevenir problemas circulatorios y cardiacos al reducir los riesgos de cardiopatías y daños nerviosos, los cuales son complicaciones de salud comunes entre las personas con diabetes.
Manténgase activo
¿Por qué es importante que las personas con diabetes se mantengan activas físicamente?
La actividad física puede ayudar a mantener bajo control la glucosa en la sangre, el peso, la presión arterial y también a aumentar el colesterol «bueno» y disminuir el colesterol «malo». También puede prevenir problemas circulatorios y cardiacos al reducir los riesgos de cardiopatías y daños nerviosos, los cuales son complicaciones de salud comunes entre las personas con diabetes.
¿Cuánto ejercicio deben hacer las personas con diabetes y con qué frecuencia?
Los expertos recomiendan realizar actividad física de intensidad moderada durante al menos 30 minutos, 5 ó más días por semana. Caminar a paso rápido, cortar el pasto, bailar, nadar o andar en bicicleta son todos ejemplos de ejercicios de intensidad moderada.
Si usted no está acostumbrado a la actividad física, es recomendable que comience por hacer un poco de ejercicio e ir aumentando gradualmente la intensidad. A medida que vaya fortaleciéndose físicamente, puede agregar algunos minutos a su horario de ejercicios. Debe hacer algo de actividad física todos los días. Es mejor caminar por 10 ó 20 minutos todos los días, que hacerlo por una hora solamente una vez por semana.
Hable con su proveedor de atención médica sobre un plan de ejercicios sin riesgo para usted. Es posible que el médico examine el funcionamiento de su corazón y sus pies para asegurarse de que no sufre de alguna afección en particular. Si tiene presión arterial alta o problemas en la vista o en los pies, es posible que deba evitar ciertos tipos de ejercicio.
Para más información, lea la publicación de los Centros para el Control y la Prevención de las Enfermedades (CDC) Controle su diabetes.
¿Qué tipos de actividad física son adecuados para las personas con diabetes?
Caminar a paso rápido, caminar por las montañas, subir escaleras, nadar, practicar ejercicios aeróbicos, bailar, andar en bicicleta, patinar, esquiar, jugar al tenis, baloncesto, voleibol o cualquier otro deporte, son algunos ejemplos de la actividad física que ejercita los músculos grandes y acelera el ritmo cardiaco y respiratorio, tres objetivos importantes para mantenerse en forma.
Además, la realización de ejercicios de fortalecimiento con pesas de mano, bandas elásticas o con máquinas de pesas puede ayudarle a desarrollar los músculos. Los ejercicios de estiramiento le dan flexibilidad y previenen los dolores típicos después de hacer determinado tipo de ejercicios.
Haga las actividades físicas que realmente disfruta. Cuanto más lo entretenga una actividad, más probable es que la repita todos los días. Puede ser que sea más motivante hacer ejercicio en compañía de un familiar o de un amigo.
Cuando las personas con diabetes hacen ejercicio, ¿deben tomar ciertas precauciones?
Hacer ejercicio es muy importante para que las personas con diabetes mantengan la salud, pero deben tomar ciertas precauciones.
Si padece de ciertas complicaciones relacionadas con la diabetes, hay algunas actividades físicas que deberá evitar. Los ejercicios que requieren levantar mucho peso pueden ser peligrosos para personas con presión arterial elevada, problemas vasculares o visuales. Los daños nerviosos relacionados con la diabetes pueden impedirle sentir si se lastima los pies haciendo ejercicio, lo cual puede conducir a problemas más graves. Si padece de complicaciones por la diabetes, su proveedor de atención médica le podrá informar qué tipo de actividad física es mejor para usted. Afortunadamente, existen varias maneras diferentes de hacer ejercicio.
La actividad física puede bajar demasiado los niveles de glucosa en la sangre y causar hipoglicemia, especialmente en las personas que toman insulina o determinados medicamentos orales. Los episodios de hipoglicemia pueden suceder durante el ejercicio, enseguida de terminarlo o incluso hasta un día después. Puede tener temblores, sentirse débil, confuso, irritable, ansioso, hambriento, cansado o sudoroso. Puede tener dolores de cabeza o incluso desmayarse.
Para prevenir la hipoglicemia durante la actividad física, mida su nivel de glucosa antes de iniciar el ejercicio. Si es inferior a 100, coma algo liviano. Además, cada vez que vaya a realizar ejercicio, siempre tenga con usted algún alimento o tabletas de glucosa. Las personas con diabetes no pueden saltarse ninguna comida, especialmente antes de realizar ejercicios. Al terminar, mida sus niveles de glucosa en la sangre para ver cómo lo ha afectado el ejercicio. Si toma insulina y se dispone a iniciar un régimen de ejercicios, pregúntele a su proveedor de atención médica si es mejor realizar actividades físicas en algún momento específico del día o si debe cambiar la dosis antes de comenzar.
Por otra parte, no debería hacer ejercicio cuando los niveles de glucosa en la sangre se encuentran muy altos, porque entonces podrían elevarse aún más. No realice ningún ejercicio si su glucosa en la sangre está por encima de 300 o si su nivel de glucosa en ayunas es superior a 250 y tiene cetonas en la orina.
Cuando haga ejercicio, use calcetines de algodón y calzado deportivo que le queden bien y sean cómodos. Luego de hacer ejercicio, revísese los pies para ver si tiene lastimaduras, ampollas, irritación, cortaduras o algún otro tipo de heridas.
Debido a que la glucosa en la sangre puede verse afectada por la deshidratación, debe tomar abundante líquido mientras realiza actividades físicas.
Para más información lea la publicación del Centro Coordinador Nacional de Información sobre la Diabetes, lo que usted debe saber de la actividad física y la diabetes.