Existen muchos tipos diferentes de vasculitis. Algunos son leves, otros son más graves o incluso pueden poner en riesgo la vida. Te damos más detalles a continuación.

¿Qué es la vasculitis?

La vasculitis es una inflamación en los vasos sanguíneos. Puede dañarlos e impedir que transporten suficiente sangre a las partes del cuerpo que la necesitan. La vasculitis puede afectar distintas partes del cuerpo.

Existen muchos tipos diferentes de vasculitis. Algunos son leves, otros son más graves o incluso pueden poner en riesgo la vida.

La vasculitis en algunos casos se produce con otra enfermedad, como lupus o artritis reumatoide. Sin embargo, también puede producirse en personas sin otros problemas de salud.

¿Cuáles son los síntomas de la vasculitis?

Los síntomas principales son, entre otros:

• Lesiones en la piel o úlceras.
• Cansancio.
• Fiebre.
• Dolor en músculos y articulaciones.
• Falta de apetito – Algunas personas con vasculitis pierden peso sin intentarlo.
• Dolor en el área del estómago.
• Orina de color marrón u oscuro.
• Adormecimiento, debilidad o dolor en las manos, los pies, u otras partes del cuerpo.

¿Es necesario que me realice pruebas?

Sí. Los síntomas de la vasculitis pueden ser muy similares a los de otras enfermedades, por lo tanto su médico le solicitara los estudios de laboratorio y gabinete necesarios.

¿Cómo se trata la vasculitis?

Depende del tipo de vasculitis que tenga. Estos son algunos de los tratamientos:

• Esteroides– Estas medicinas pueden reducir o controlar la inflamación. Debido a que este grupo de medicamentos pueden causar efectos secundarios graves, los médicos intentan darlas por el menor tiempo posible.

• Medicinas fuertes que “apagan” el sistema inmunitario, como la ciclofosfamida  – Estas medicinas pueden tomarse junto con las medicinas esteroides. Los médicos las usan para tratar los casos más graves de vasculitis.